CIUDAD DEL VATICANO (CNS) -- Frente a décadas de creciente secularismo, la Iglesia Católica debe invertir en las familias y en el fortalecimiento de otras formas de comunidad para transmitir la fe, dijo el Papa Francisco.

"La gran cuestión que se nos plantea es comprender cómo superar la ruptura que se ha producido en la transmisión de la fe", dijo el Papa a los miembros de la sección para la nueva evangelización del Dicasterio para la Evangelización el 15 de marzo. "Para ello, urge recuperar una relación eficaz con las familias y los centros de formación".

Desarrollar la fe en Cristo "requiere una experiencia significativa vivida en la familia y en la comunidad cristiana como un encuentro con Jesucristo que cambia la vida", escribió en su mensaje a los miembros del dicasterio durante su asamblea plenaria. "Sin este encuentro real y existencial, se estará siempre sujeto a la tentación de hacer de la fe una teoría y no un testimonio de vida".

Como ya lo ha hecho en varias reuniones en las últimas semanas, el Papa hizo que un ayudante, monseñor Filippo Ciamanelli, leyera su discurso al grupo.

En su mensaje, el Papa escribió que el secularismo de las últimas décadas "ha creado enormes dificultades" para la Iglesia, "desde la pérdida del sentido de pertenencia a la comunidad cristiana hasta la indiferencia respecto a la fe y sus contenidos".

Como resultado, escribió, es hora de que la Iglesia llegue a "comprender qué respuesta eficaz estamos llamados a dar a las nuevas generaciones para que recuperen el sentido de la vida".

Señaló que el atractivo de la autonomía personal, "planteada como una de las reivindicaciones del secularismo, no puede ser teorizada como independencia de Dios, porque es Dios mismo quien garantiza la libertad a la acción personal".

Y aunque los avances tecnológicos ofrecen muchas vías para que la humanidad progrese, incluso a través de desarrollos en medicina y métodos para proteger el medio ambiente, también pueden crear una visión "problemática" de la humanidad que no satisfaga "la necesidad de verdad que habita en cada persona", dijo.

El Papa Francisco instó a los miembros del dicasterio a desarrollar una "espiritualidad de la misericordia" como base de su labor evangelizadora. La gente es más receptiva a la evangelización cuando se hace con un "estilo de misericordia", escribió. Comunicando misericordia, añadió, "el corazón está más abierto a la conversión".

El Papa agradeció al dicasterio su trabajo en el desarrollo de recursos para los catequistas, haciendo referencia al último "Directorio para la Catequesis" publicado por el dicasterio en 2020, y elogió el apoyo que han dado a los que sirven como catequistas.

"Espero que los obispos sepan alimentar y acompañar las vocaciones a este ministerio, especialmente entre los jóvenes", escribió, "para que se reduzca la brecha entre las generaciones y la transmisión de la fe no aparezca como una tarea confiada sólo a los mayores".

El Papa también habló de los planes para el Jubileo 2025, que ha pedido al dicasterio que organice. El tema del año santo es "Peregrinos de la esperanza".

"Esta virtud teologal ha sido poéticamente vista como la 'hermana pequeña' en medio de las otras dos, la fe y la caridad, pero sin la cual estas dos no avanzan, no se expresan lo mejor posible", escribió. El pueblo santo de Dios tiene una gran necesidad de esperanza, dijo.